¡Todos sabemos lo que ocurrió el 28J en Venezuela! (42)


¡Amoroso el operador clave del Fraude electoral! (42)
¡Esto no es un Fraude más, esto es desconocer y violar
groseramente la soberanía popular!
¡La voluntad del pueblo tiene que ser respetada!
¡Venezuela merece un gobierno decente!
¡Un gobierno de transformación democrática!
¡Hacer a Venezuela grande de nuevo!
¡Te contaré una historia (132)!

¡Crónica de un Fraude anunciado XV! ¡PROHIBIDO OLVIDAR! ¡La voluntaria salida de Edmundo a punta de pistolas! ¡La coacción a Edmundo se inició en la embajada de Holanda, pero su titular no dejó entrar a los chavistas! ¡Qué grande Edmundo lo logro! ¡Esto no tiene nombre! ¡Lo que está haciendo Edmundo González en Europa no tiene precio! ¿Y, ahora qué? ¡Una imagen vale más que mil palabras! ¡Delcy y Jorge Rodríguez utilizaron la embajada de España para tender una trampa a Edmundo González! ¡Edmundo González denuncia coacciones del chavismo en la Embajada de España para acatar la victoria de Maduro! ¡Delito en la Embajada! ¡El embajador de Sánchez agasajó a los chavistas con Chivas 12 años y chocolate en su coacción a Edmundo! ¡Cayetana Álvarez de Toledo pregunta al Gobierno de Pedro Sánchezpor qué permitió extorsiónen la Embajada en Venezuela y el papel de Zapatero! ¡Cómo Edmundo le borró la risita cínica a Jorge Rodríguez! ¡Jorge no pudo con Edmundo, le tumbaron el Show! ¡Esto apenas comienza, vamos hasta el final! (42).
¿Y, ahora qué?
¡La coacción en la firma de documentos!
Por Carolina Jaimes Branger, septiembre 23, 2024.
La legislación casi en todo el mundo exige que el consentimiento expresado por un individuo o sujeto de derecho sea libre. Los actos legales son numerosos y variados en diversas áreas de la vida cotidiana, desde contratos de trabajo hasta la compra de propiedades, y declaraciones como renuncias y aceptaciones. Sin embargo, para que una manifestación de voluntad que pretenda tener efectos jurídicos sea válida, una de las condiciones esenciales -además de la capacidad para consentir- es que debe ser voluntaria. A aquellas circunstancias que afectan la voluntad y (o) libertad de la persona que actúa (el error de derecho excusable y la coacción, por ejemplo), se les denominan vicios del consentimiento. En el ámbito del derecho civil, la ausencia de capacidad para consentir suele conducir a la nulidad absoluta de lo actuado -se le considera como inexistente- mientras que la presencia de los vicios del consentimiento tiende a conducir a la anulabilidad del acto jurídico. A los actos anulables se les conoce como actos afectados de nulidad relativa y se les considera eficaces, a menos que el afectado solicite la anulación del acto alegando, precisamente, la existencia de vicios del consentimiento. Pero esta explicación es propia del derecho civil y se aplica mientras los actos considerados no penetren en el campo del derecho penal. Al penetrar el ámbito penal, el término de “coacción civil” es reemplazado por términos más precisos: violencia, amenaza de un grave daño (a la persona o a las personas, a sus bienes, a la vida, al honor, ataque a la libertad individual, constreñimiento, simulación de órdenes de la autoridad, por varias personas, una de las cuales está manifiestamente armada).
La declaración que supuestamente expresó o plasmó Edmundo González Urrutia en la carta supuestamente firmada en la residencia de la embajada de España en Caracas y en presencia del embajador del reino de España -quien fue testigo presencial de dichas actuaciones- pudiera ser analizada bajo los parámetros o reglas del derecho penal y mucho más allá del derecho civil para obligaciones civiles. Si estamos en presencia de un supuesto de hecho de naturaleza penal, la enunciación de la ecuación varía.
Aparentemente, Edmundo González Urrutia se encontraba ubicado dentro de la residencia de la embajada de España en Caracas. Es un error muy frecuente considerar que una embajada de un país extranjero en Venezuela es territorio extranjero. En realidad, el territorio ocupado por una embajada de un país extranjero sigue siendo territorio venezolano. Lo que sucede es que el recinto diplomático se encuentra protegido y beneficiado por tantas inmunidades que se contemplan en la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas y por el derecho internacional público consuetudinario que, prácticamente, es casi como si se tratara de un territorio extranjero. Pero allí se encontraban presentes dos altos funcionarios del poder ejecutivo -evidentemente con la aquiescencia de la cancillería española- y el embajador de España, quien casi muy seguramente seguía instrucciones de sus superiores en el gobierno español y quien goza en Venezuela -y más aún dentro del recinto de la embajada que es inviolable- de inmunidad de jurisdicción.
Y es allí, en la residencia de la embajada española pero en territorio venezolano -privilegiado con las inmunidades concedidas por la mencionada convención internacional como ya se ha dicho- que presuntamente los dos altos funcionarios actúan aparentemente conforme, al menos y sin excluir otros, a un supuesto derecho de hecho contemplado en el Código Penal y que dice textualmente: “El que por medio de violencias o amenazas de un grave daño a la persona o a sus bienes, haya constreñido a alguno a entregar, suscribir o destruir en detrimento suyo o de un tercero, un acto o documento que produzca algún efecto jurídico cualquiera, será castigado con presidio de tres a seis años.”
El artículo mencionado lo encontré sorpresivamente en un capítulo del Código Penal titulado “Del Robo, de la Extorsión y del Secuestro”.
Las legislaciones de muchos países, como el Código Civil en diversas jurisdicciones, establecen que el consentimiento debe ser libre y voluntario para que una obligación o un contrato sea válido. En el Derecho Civil de la legislación venezolana, toda obligación debe ser libre de coacción (presión ejercida sobre el sujeto que es tan fuerte, que la hace intolerable). En la coacción, el individuo no tiene otro remedio que firmar. “Mata a fulano, porque si no lo haces, matamos a toda tu familia”. Eso constituye una situación que vicia el consentimiento de nulidad.
En un país “normal”, si alguien se encuentra en una situación en la que ha firmado un documento bajo coacción, es crucial actuar con rapidez para anular el acto jurídico. Con cualquier evidencia que pueda demostrar que firmó el documento bajo coacción (esto podría incluir mensajes, correos electrónicos, testigos, o cualquier otra forma de prueba) y con el apoyo de un abogado, puede presentar una demanda para que el tribunal declare la nulidad del documento. Pero ya sabemos lo que van a decir en Venezuela los tribunales que evaluarán las pruebas.
La coacción en la firma de documentos es una grave violación del principio de consentimiento libre y voluntario que subyace en cualquier acto jurídico válido. Un documento firmado bajo tales circunstancias está viciado de nulidad absoluta y no tiene efectos legales… Al menos, en el mundo libre. (Escrito con la asesoría del Dr. Luis Alejandro Aguilar Pardo).
Fuente: EN EL NACIONAL, septiembre 23, 2024.
¿Y, ahora qué?
Ingrid Betancourt Pulecio @IBetancourtCol en la Red Social X:
Con oír a este personaje (Jorge Rodríguez) le queda a uno claro que como mínimo es un imbécil:  para demostrar que no presionaron a @EdmundoGU   para salir de Venezuela explica que EGU es ... un cobarde! Porque Él hubiera aguantado y no hubiera firmado por nada del mundo 🤡 septiembre 19, 2024.
Orlando Avendaño @OrlvndoA en la Red Social X:
#ÚLTIMAHORA | El presidente electo Edmundo González cuenta que Jorge y Delcy Rodríguez lo amenazaron y chantajearon y lo forzaron a firmar un documento que es “nulo”, de lo contrario habría consecuencias. “No me voy a callar. Jamás los voy a traicionar”.
Septiembre 18, 2024.
Nicmer Evans @NicmerEvans en la Red Social X:
Edmundo González afirma que la carta que se señala que firmó admitiendo el resultado refrendado por el TSJ, fue firmada bajo coacción, y describe los detalles de lo que sucedió. Septiembre 18, 2024.
¡Terrorismo de Estado! ¡Yo me declaro en desobediencia civil, Artículo 350!
¡Una imagen vale más que mil palabras!
En la España de hoy el chantaje está normalizado y la sancionada Delcy Rodríguez, impedida de ingresar a Europa, es bienvenida.
El aforismo es contundente, y así fue como lo expresé en “La Tarde”, programa de Idania Chirinos por NTN24. No obstante, queda mucho por decir. Para empezar, la foto es el retrato de un golpe de Estado, un “putsch” contra la soberanía del sufragio, a las apuradas, bajo sorpresa y desorganizado.
En la escena se hace efectivo el destierro del presidente electo de Venezuela. La imagen es de por sí la confesión de parte de un delito en desarrollo: la impunidad exhibicionista de la dictadura a la vista de todos. Según el régimen, González está firmando una carta en la que admite su derrota en la elección del 28 de julio y reconoce la victoria de Maduro, una “confesión” viciada de nulidad.
Es que no es competencia de Edmundo González ni de persona alguna determinar un resultado electoral. Dicha atribución es exclusiva de lo que arroje el cómputo de los votos con los datos en la mano; o sea, las actas que no mostró el gobierno y sí mostró la oposición. En ese documento el presidente electo también manifiesta su deseo de abandonar Venezuela.
Todo lo anterior por su propia iniciativa y voluntad, dijo Jorge Rodríguez con su habitual mitomanía y su sobreactuado descontrol. Como funcionario de más alta jerarquía del poder legislativo su presencia en la escena, junto a la segunda persona en la jerarquía del Ejecutivo, su hermana Delcy, indica que se trató de un acto de Estado, de un Estado cuya única gramática es la represión.
El lenguaje corporal de los allí presentes comunica exactamente eso. El presidente electo siendo intimidado y chantajeado, supimos después que sus hijas eran la moneda de cambio. Se lo ve bajo coacción y a punto de firmar una declaración apócrifa, redactada por la dictadura para su auto-incriminación (de cometer fraude electoral) y la exoneración de Maduro (el verdadero responsable de un fraude electoral). Una foto vale más que mil palabras, sobre todo si es evidencia de un acto delictivo.
O sea, la foto es una confesión de parte, no importa que el régimen diga que firmó de manera voluntaria. Al verla, la primera idea que vino a mi mente fue la dictadura militar argentina entre 1976 y 1983. Existen testimonios de personas que firmaron y entregaron escrituras de sus casas y departamentos en cautiverio, luego apropiadas por personal militar. Ello ocurría bajo tortura, lo cual Jorge Rodríguez traduciría como “voluntariamente”.
La foto también incluye a los cómplices: el ministerio de exteriores de España en la figura de su ministro y su embajador en Venezuela, el set es en la propia residencia del embajador español. En la España de hoy el chantaje está normalizado y la sancionada Delcy Rodríguez, impedida de ingresar a Europa, es bienvenida. Con tanta normatividad vulnerada, ambos funcionarios deberían ser interpelados en el parlamento, pues es claro que no renunciarán. El incumplimiento del gobierno de Sánchez de sus obligaciones europeas debe ser señalado.
Es que, como los torturadores bajo Videla, ellos también cumplen órdenes, sólo que en este caso son las del intermediario entre Maduro y el gobierno de España, pieza angular en la planificación y ejecución de esta operación, desde la salida de la embajada de Países Bajos con pretextos, el asilo en la de España, el avión del gobierno y el manejo discursivo.
Hablo de Zapatero, a quien el propio Edmundo González se refirió como “artífice” de la reunión entre él y los hermanos Rodríguez el día 7 en la embajada de España. Cuando Pedro Sánchez llamó “héroe” a González, ese mismo día, la operación ya estaba en marcha: golpe y deportación en menos de 48 horas. Tanta opacidad no comenzó hoy; cuatro años atrás escribí un texto titulado “España chavista” en relación a esto.
El presidente electo de Venezuela escogió el secuestro de Sánchez-Albares y Zapatero por sobre el de Maduro y los hermanos Rodríguez en el Helicoide. Es mejor, sin duda, pero ojalá que tenga claro que no deja de ser un secuestro. @hectorschamis
Fuente: infobae, Por Héctor Schamis, septiembre 21, 2024.
En el portal web del diario digital “EN EL NACIONAL”, el día 20 de septiembre de 2024, fue publicado un artículo, escrito por la Redacción El Debate, cuyo texto lleva por título el siguiente: ¡Delcy y Jorge Rodríguez utilizaron la embajada de España para tender una trampa a Edmundo González!
Tras las fotos, el régimen de Maduro difunde también grabaciones de lo ocurrido en la residencia del embajador, Ramón Santos. Fue él quien recibió a los hermanos y los condujo hasta el opositor.
No solo hicieron fotos. También lo grabaron todo dentro de la embajada de España en Venezuela, con dispositivos ocultos. El presidente de la Asamblea Nacional, electa en 2020, Jorge Rodríguez, hizo públicos en la tarde de este jueves varios audios sobre la supuesta negociación con Edmundo González previa a su expatriación.
El último giro de tuerca evidencia que el régimen de Nicolás Maduro utilizó la embajada española en Caracas para tender una trampa al candidato opositor. Cuando, en teoría, los hermanos Delcy y Jorge Rodríguez ni siquiera podían estar ahí, porque ambos tienen prohibida la entrada en territorio de la UE y, por tanto, en cualquier embajada de los Veintisiete en cualquier parte del mundo. Durante su comparecencia, un periodista preguntó al presidente del Parlamento venezolano si González Urrutia fue consciente de que le estaban grabando. Él dio la callada por respuesta.
Y hay más. Porque cada detalle que va trascendiendo compromete más al embajador español. Ramón Santos en persona fue quien recibió en su residencia a los hermanos Rodríguez, obviando las sanciones de la UE. No solo eso, sino que además condujo a la vicepresidenta de Venezuela y al presidente de la Asamblea Nacional hasta Edmundo González, que estaba dentro.
Así lo reveló el propio Jorge Rodríguez en una entrevista en Telesur, en la que utilizó al embajador español como coartada. Con el argumento de que cómo iban él y su hermana a coaccionar y chantajear al opositor venezolano si el documento fue firmado en presencia del diplomático español. «Cómo ocurre que la vicepresidenta ejecutiva de Venezuela y el presidente de la Asamblea Nacional van a la embajada de España, son recibidos por el embajador y el embajador los conduce a la reunión con González Urrutia», describió Rodríguez, hablando de sí mismo en tercera persona.
Según la versión del Ministerio de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares dio «instrucciones directas» al embajador de «no inmiscuirse en las gestiones que pudiera realizar el líder opositor» con el régimen de Nicolás Maduro para salir de Caracas. Pero, atendiendo a las declaraciones del presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Santos no fue un mero observador.
Edmundo González junto al embajador español en Venezuela, antes de subir al avión que le llevó a España
El diplomático español no es ningún advenedizo. Fue embajador de España en Bolivia entre 2008 y 2013, con José Luis Rodríguez Zapatero, que lo tiene en alta consideración. Santos llegó a Caracas en enero de 2023 para ocupar un puesto que llevaba vacante desde 2020 por distintas desavenencias de la dictadura chavista con España.
El papel de Zapatero es más turbio aún. El Mundo publica este viernes que el expresidente español animó al opositor a marcharse a España y que llamó a Delcy Rodríguez antes de que ésta se presentara en la embajada española. Zapatero envió a un interlocutor al encuentro. Un emisario cuya identidad no ha querido revelar el régimen de Maduro. De hecho, en las grabaciones difundidas su voz aparece distorsionada.
Las preguntas en torno a lo sucedido intramuros de la embajada española el 8 de septiembre sacudieron ayer la Moncloa, precisamente el día en el que los socialistas volvieron a votar en contra del reconocimiento de González Urrutia como vencedor de las elecciones y presidente electo. Esta vez, en el Parlamento Europeo. El miércoles había sido en el Senado y, una semana antes, en el Congreso.
Alberto Núñez Feijóo pidió desde Roma la dimisión del ministro Albares y el cese del embajador, al que el día de autos -8 de septiembre- se vio acompañando a Edmundo González hasta la escalerilla del avión de las Fuerzas Armadas española que lo trajo a Madrid, con gesto amigable. «El Gobierno ha mentido. La diplomacia española, pilar esencial de la diplomacia europea en Iberoamérica, no puede estar al servicio de un régimen dictatorial», señaló el líder de los populares.
El Gobierno de España lleva dos semanas aferrándose a la versión de que su papel fue, única y exclusivamente, acordar con el Ejecutivo de Caracas el papeleo sobre el coche que trasladó a González al aeropuerto y el avión que lo condujo directo al exilio. Pero la imagen de Edmundo González firmando lo que le ponen delante en la embajada de España vale más que mil palabras, a decir del PP y Vox. «La diplomacia española no puede estar al servicio del crimen», sentenció la diputada popular Cayetana Álvarez de Toledo.
La polémica pilló a Albares en Bruselas. El ministro de Exteriores no aclaró los muchos interrogantes, sino que cargó contra el PP por sus «acusaciones falsas de desestabilización», que comparó con las realizadas por el propio régimen de Maduro. También pidió a Feijóo que desautorizara a Esteban González Pons por decir «cosas que son absurdas, pero tremendamente injuriosas para nuestro país». Lo que había dicho el vicesecretario de Institucional del PP fue que el Gobierno de Pedro Sánchez ha sido «cooperador necesario» del «golpe de Estado en Venezuela. Con Zapatero como el «gran urdidor».
Los populares quieren que el titular de Exteriores comparezca en el Congreso cuanto antes, para que dé respuesta a algunas de las cuestiones que hasta ahora no la tienen: cómo es posible que el Gobierno de Pedro Sánchez permitiera a los hermanos Rodríguez acceder a la embajada cuando tienen prohibida la entrada en la UE. Cuál fue exactamente la función del embajador, que aparece en las fotografías. Si Santos sabía que sus invitados lo estaban grabando todo. Si actuó por cuenta propia o Albares estaba informado de todo. Y si, en algún momento de la negociación, el Ejecutivo español se comprometió a no reconocer al líder opositor como ganador de los comicios.
«Yo creo que el PP debería dejar a Edmundo González descansar en paz, tranquilamente, que es lo que quiere ese señor. Me imagino que engrosará la little Caracas del barrio de Salamanca», ironizó el portavoz de Sumar en el Congreso, Íñigo Errejón, en TVE. Una formación que también se sienta en el Consejo de Ministros.
En el portal web del diario digital “EL PAÍS América”, el día 18 de septiembre de 2024, fue publicado un artículo, escrito por los periodistas Juan Diego Quesada/Florantonia Singer, cuyo texto lleva por título el siguiente: ¡Edmundo González denuncia coacciones del chavismo en la Embajada de España para acatar la victoria de Maduro!
El candidato opositor asegura que solo firmando el escrito el chavismo le concedería el salvoconducto para viajar a España.
La salida de Venezuela de Edmundo González había estado hasta ahora rodeada de secretismo. Ni el candidato que ganó las elecciones, según las actas publicadas por la oposición, ni España como país acogedor ni el chavismo habían revelado los detalles de lo que ocurrió ese sábado 7 de septiembre, casi de madrugada, cuando el veterano diplomático se subió a un avión de las Fuerzas Armadas españolas y voló a Madrid. En ese momento nadie esperaba que se fuese del país. Este miércoles, el presidente de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez, ha revelado un documento firmado esa noche, en el que González reconoce “las decisiones adoptadas por los órganos de justicia en el marco de la Constitución, incluyendo la precitada sentencia de la Sala Electoral”. “Aunque no la comparto, la acato”, continúa el escrito. En otras palabras: el candidato daba validez a la victoria que el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), controlado por el chavismo y sin verdadera independencia judicial, le otorgaba a Nicolás Maduro.
González, desde Madrid, ha afirmado que aceptó esos puntos bajo coacción. “Hubo horas muy tensas de coacción, chantaje y presiones. En esos momentos consideré que podía ser más útil, libre que encerrado e imposibilitado de cumplir las tareas que me encomendó el soberano. Un documento producido bajo coacción está viciado de nulidad absoluta, por un vicio grave en el consentimiento”, ha asegurado. Ese documento es una carta dirigida a Rodríguez, presidente del Parlamento venezolano, y firmada por Edmundo, en la que reconoce a todas las autoridades nacionales, sostiene que ha decidido salir del país, dice que limitará su actividad pública en el extranjero y que no ejercería, en ningún caso, representación formal o informal de los poderes públicos del Estado venezolano.
La misiva corrió primero en redes sociales sin presentar la firma de González. En televisión, se ha mostrado completa, así como fotografías del momento en el que se firmó, donde aparecen González, el embajador español en Caracas, Ramón Santos, Rodríguez y su hermana, la vicepresidenta Delcy Rodríguez, en torno a una mesa en el corredor que antecede el jardín de la residencia oficial de España en Caracas. También se han difundido imágenes abordando el avión acompañado por el diplomático español. Horas después, Edmundo González explicó que había aceptado esas condiciones a la fuerza.
El chavismo ha interpretado la marcha del candidato que ganó las elecciones como una victoria y ahora, con la revelación de este secreto, quiere dar por zanjado el conflicto electoral. Rodríguez ha dicho que mantuvo el documento a resguardo y que ha decidido publicarlo después de que el abogado José Vicente Haro asegurara que su defendido no había firmado ningún documento y que este estaría violando los acuerdos supuestamente consentidos en esa carta y las leyes del asilo político.
“Le doy 24 horas al señor Edmundo González para que desmienta esa declaración de que fue coaccionado o presento los videos y audios de que el escenario fue cordial y cortés, algo de lo que el embajador español fue testigo”, dijo Rodríguez. “Si usted firmó bajo coacción, entonces el embajador español fue testigo de una coacción… Si usted firmó bajo coacción, ¿cómo es que una de sus hijas vive en Venezuela tranquilamente?”, agregó el principal operador político del chavismo. España se encuentra ahora en una posición incómoda, en la que debe tomar una postura a favor de una u otra de las partes. En este acuerdo que permitió la salida del opositor medió el expresidente español José Luis Rodríguez Zapatero.
Fuentes del Ministerio español de Asuntos Exteriores han asegurado que la decisión de que los dos altos cargos del régimen chavista, Delcy y Jorge Rodríguez, accedieran a la residencia del embajador español en Caracas la tomó el propio Edmundo González sin ninguna intervención del embajador Ramón Santos. Según las mismas fuentes, el ministro José Manuel Albares dio instrucciones al diplomático español para que “no interfiriera en las gestiones” que quisiera mantener el excandidato de la oposición una vez que se refugió en l residencia oficial española, el 5 de septiembre. “El embajador [Ramón Santos] no tuvo nada que ver. La iniciativa y la decisión fueron suyas, tenía libertad de reunirse con quien quisiera”, añadieron. Albares aseguró la semana pasada que se ofreció a Edmundo González permanecer en la residencia diplomática todo el tiempo que quisiera y que este decidió pedir el asilo en España, lo que le fue concedido, informa Miguel González.
Esteban González Pons, vicesecretario de Asuntos Institucionales del PP, ha cargado contra la conducta del Gobierno español en la salida del dirigente opositor de Venezuela. “El embajador de Sánchez no sólo consintió el chantaje en su residencia, además permitió que hicieran fotos para seguir chantajeando después. Albares, ¿qué sabes y te callas? ¿Dónde te has escondido? Esta es política de mafiosos y criminales, qué vergüenza el nombre de España ahí”, ha escrito en la red social X.
La firma que, según Edmundo González, se vio obligado a estampar no cambia que el Consejo Nacional Electoral, el ente encargado de organizar las elecciones y mostrar el resultado mediante las actas, sigue negándose a enseñarlas, a pesar de toda la presión internacional. La insistencia del chavismo en no ser transparentes da a entender que la oposición, como preveían las encuestas, ganó con un amplio margen al oficialismo. Maduro y su entorno, sin embargo, no reconocen la derrota y asegura que el actual presidente volverá a investirse el 10 de enero, con la excusa del fallo del TSJ. La unanimidad respecto al fraude electoral ya es prácticamente total. Estados Unidos y otras naciones han declarado presidente electo a Edmundo, mientras que otros han tirado más de prudencia y continúan en la línea de exigir las actas para reconocer a Maduro, cosa que a estas alturas parece poco probable que el chavismo vaya a hacer. Estos países no quieren adelantarse a acontecimientos y esperan poder negociar una salida con el chavismo, una suerte de transición, antes de que llegue enero.
En el portal web del diario digital “EN EL NACIONAL”, el día 22 de septiembre de 2024, fue publicado un artículo, escrito por el periodista Alfonzo Ussía, artículo publicado en el diario El Debate de España, cuyo texto lleva por título el siguiente: ¡Delito en la Embajada!
Una Embajada de España no puede convertirse en el escenario de un delito. Un delito de chantaje y coacción a un refugiado en un recinto inviolable. El presidente electo de Venezuela, reconocido como tal en los Estados democráticos, y negado en España por el cinismo socialista, se amparó en la inviolabilidad de una embajada, la española, para no ser detenido por las hordas de Maduro, Cabello, Cilia, Zapatero, los hermanos Delcy –la de las maletas– y Jorge Rodríguez, Monedero y Úrsula von der Leyen, que son la misma cosa o algo muy parecido. El presidente electo de Venezuela, Edmundo González, amparado por el desamparo de la Embajada de España, fue conminado a firmar un documento carente de valor y garantía por el que se comprometía a reconocer la victoria electoral del criminal Maduro a cambio de su libertad y su exilio en nuestro país. Con semejante coacción, Zapatero y Albares nos convirtieron en delincuentes a todos los españoles, porque la Embajada de España no es un chalé propiedad del Gobierno. Es la representación diplomática de un Estado –todavía– libre y democrático. Entretanto, ya con don Edmundo en España, las cámaras Alta y Baja, Senado y Congreso de los Diputados, aprobaron reconocer al político exiliado como presidente electo de Venezuela. Y la Eurocámara lo mismo. Se dice que el embajador de España no intervino en el chantaje, pero su inacción, aunque se produjera siguiendo las órdenes del ministro Albares, le convierte en cómplice de la coacción. O firma esto o ya sabe lo que le espera–. Lo que le esperaba era la detención, el ingreso en una de las cárceles de la reconocida bestia, y quizá una «muerte fortuita e inesperada» en una de las galerías carcelarias.
Observen con atención la escena fotografiada. El presidente electo firma, mientras los hermanos «gangster» observan el acto de la rúbrica con la victoria reflejada en sus expresiones. ¿Quién les permitió entrar en nuestra Embajada? ¿Quién les autorizó a chantajear a un presidente electo? ¿Quién ofreció a los hermanos el territorio español – ¿la Embajada de España en cualquier nación forma parte de nuestro territorio-, para atemorizar a un refugiado cuyo único delito perpetrado en Venezuela fue el de ganar con una diferencia abismal de votos al animal de Maduro? ¿Quién siguió desde el Ministerio de Asuntos Exteriores de Madrid la consumación del chantaje, minuto a minuto? España no puede tener un ministro de Asuntos Exteriores entregado de lleno al despacho de influencias de Zapatero, que en el caso que nos ocupa, es el que manda y ordena por encima del propio presidente del Gobierno de España, más preocupado por su flor y sus Lamborghinis que por el estricto cumplimiento de la legalidad internacional. Sin ánimo de enfangar las cosas. ¿Cuánto y cómo perciben a cambio de su «asesoramiento» Zapatero y sus colaboradores del régimen criminal de Maduro? Ignoro la respuesta, pero estoy seguro de la mía. El trabajo, cuando está bien hecho –y Zapatero lo borda–, jamás es gratuito.
España ha delinquido plegándose a una invasión eventual de su territorio. Ya lo hizo, años atrás, de forma menos oficial. Recuérdese el episodio del embajador Máximo Cajal, y su confusa firmeza siendo embajador de España en Guatemala. Aquella confusión, que facilitó el asalto guerrillero a la Embajada de España en Guatemala le costó la vida a su primer secretario, Jaime Ruiz del Árbol. No obstante, Cajal, amparado por el poderoso enjambre de Prisa, apenas padeció profesionalmente sus errores. Pero fueron errores personales, no de España. Y en el caso que nos ocupa, el delincuente ha sido España, y los impulsores del delito, algunos más de los mencionados en los primeros párrafos de este texto.
Tenemos un ministro de Exteriores que nos ha obligado a delinquir sin pedirnos permiso.
Rescatemos a Venezuela, ¡2024 Ya! *Según el Banco Mundial la Línea de Pobreza Extrema $64,5 mensual (Diario $2,15). Fuente: Jesús Casique @jesuscasique1.
Salario Mínimo Bs.130  
Tipo de Cambio Bs/US$41,04 (28/10/2024)
Salario mensual $3,16
Diario $0,10
*Salario de Miseria y Hambre.
Pensionados y Jubilados, descapitalizados.
No al salario de hambre.
No a pensiones de muerte.
Con hambre y miseria no hay educación.
956 días sin aumento salarial.
46% de inflación interanual (OVF).
$531,57 CAF (CENDAS). #BonoNoEsSalario
¡Un detalle final…!
En el portal web del diario digital “OK diario España”, el día 20 de septiembre de 2024, fue publicado un artículo, escrito por el periodista Segundo Sanz @SegundoSanz, cuyo texto lleva por título el siguiente: ¡El embajador de Sánchez agasajó a los chavistas con Chivas 12 años y chocolate en su coacción a Edmundo!
Así lo revela el hermano de Delcy Rodríguez, presente en la reunión, publicando un audio de las conversaciones "Open bar" se escucha en la cinta, mientras el colaborador de Maduro dice que el embajador trajo "botellas" y "hielo".
El embajador en Caracas nombrado por el Gobierno de Pedro Sánchez, Ramón Santos, agasajó con «whisky Chivas Regal de 12 años» y «chocolate venezolano» a los chavistas de la narcodictadura de Nicolás Maduro que coaccionaron en dependencias de la legacía española a Edmundo González, presidente electo tras los comicios del pasado 28 de julio, para dejar el país latinoamericano con destino a Madrid. Así lo ha revelado Jorge Rodríguez, presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, en una rueda de prensa donde publicó varios audios de las conversaciones mantenidas el pasado 7 de septiembre en la reunión celebrada en la residencia oficial del embajador español en Venezuela.
En esta cita participaron Edmundo González -que ha denunciado que le obligaron a firmar un documento «bajo coacción» para permitirle la salida del país si reconocía a Maduro como ganador del 28J-, la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez; su hermano y presidente de la Asamblea, Jorge Rodríguez; el embajador español, Ramón Santos, y un intermediario, Eudoro González, ex diputado del partido opositor Primero Justicia en la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), próximo al ex presidente socialista español José Luis Rodríguez Zapatero.
«Cuando ya estábamos sentados, ‘¿se quieren tomar algo?’ (se nos dijo). Hay whisky. Trajeron una botella de whisky Chivas Regal de 12 años. Trajeron vasos. Después, el embajador salió a buscar hielo. Trajo hielo, y después trajo unos chocolates y dijo: ‘El chocolate es venezolano’», relata Rodríguez.
Previamente, el presidente chavista de la Asamblea Nacional de Venezuela, en su comparecencia ante la prensa este jueves, mostró un vídeo donde se escucha a los participantes responder sobre lo que iban a tomar tras el ofrecimiento de «whisky» y un «picantito». «Open bar» (barra libre) y «acompáñennos, aquí hay de todo, ya sabe» son otros comentarios que pueden escucharse en la cinta. En su caso, la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, aparece diciendo: «Yo tengo mi té».
Según su hermano, Delcy Rodríguez no bebió el whisky Chivas ofrecido por el embajador porque «estaba tomando una medicación» y «tampoco le gusta tomar». Además, el colaborador de Maduro sostiene que había un «tufillo alcohólico en la reunión antes de que llegara el embajador con las botellas», como la de Chivas.
A preguntas de la prensa sobre las palabras del abogado de Edmundo, Vicente Haro, que aseguró que las fotografías y las grabaciones se hicieron por parte del régimen chavista sin su consentimiento, Rodríguez alegó que fueron tomadas como pruebas ante interpretaciones no del gusto de la dictadura bolivariana y afirmó que «en España puede haber un registro de grabación o de fotografía sin el consentimiento de la persona que está siendo grabada».
Con este vídeo, Jorge Rodríguez recalcó que el «clima» en que se celebró el citado encuentro en la legación española no fue de «coacción», respondiendo así al líder del PP y jefe de la oposición al Gobierno español, Alberto Núñez Feijóo, quien pidió desde Roma el cese del ministro de Exteriores, José Manuel Albares, y el del embajador Ramón Santos, así como explicaciones urgentes a Pedro Sánchez.
¡Manipulación!
En sus declaraciones, que han sido manipuladas por el Ejecutivo socialcomunista y sus corifeos mediáticos, Feijóo en ningún momento acusó al Gobierno de Sánchez de coaccionar a Edmundo, sino de permitir esta coacción de los dirigentes chavistas en dependencias españolas. De hecho, Feijóo recalcó este jueves en su comparecencia de prensa en Roma, junto al ministro italiano de Exteriores, Antonio Tajani, que «bajo ningún concepto se puede tolerar que en una embajada española se coaccione a nadie, menos por parte de quienes son protagonistas de un demoledor informe de Naciones Unidas de violación masiva de los derechos humanos», enfatizó, en alusión a los hermanos Delcy y Jorge Rodríguez.
Pese a ello, y después de que Edmundo González haya difundido un comunicado diciendo que ni el Gobierno de España ni el embajador le coaccionaron en el marco de su salida de Venezuela, el ministro Albares ha exigido al Partido Popular que se disculpe por «injurias y calumnias» contra el servicio exterior español.
Junto a ello, en declaraciones en TVE, Albares ha esgrimido que la actuación del Ejecutivo, con la mediación del embajador, fue priorizar el darle a Edmundo González Urrutia «un espacio» en el que pudiera tener «las conversaciones, reuniones y todo el tiempo que él lo considerase». «Lo que hace la Embajada de España en Caracas es ofrecer un espacio de seguridad, tranquilidad, de libertad para que el señor González pudiera pensar, hablar, reunirse con quien quiera», ha comentado Albares. Tras su paso por la Embajada española y firmar el salvoconducto del régimen, Edmundo fue trasladado a Madrid desde el Aeropuerto Internacional de Maiquetía Simón Bolívar en un Falcon del Ejército español.
¡Reacciones! ¡Comunidad Internacional denuncia Fraude!
En el portal web del diario digital “albertonews”, el día 20 de septiembre de 2024, fue publicado un artículo, escrito por la Redacción Europa Press, cuyo texto lleva por título el siguiente: ¡Cayetana Álvarez de Toledo pregunta al Gobierno de Pedro Sánchez por qué permitió extorsiónen la Embajada en Venezuela y el papel de Zapatero!
La portavoz adjunta del PP en el Congreso, Cayetana Álvarez de Toledo, ha preguntado al Gobierno por qué permitió «la extorsión» al opositor venezolano Edmundo González en la Embajada de España en Caracas y qué papel jugó el expresidente del Ejecutivo José Luis Rodríguez Zapatero en esta «operación de chantaje»; al tiempo que ha instado al ministro de Exteriores, José Manuel Albares, a «decir que Venezuela es una dictadura y dimitir».
«¿Cómo es posible que la Embajada de España se haya convertido en el escenario de una extorsión, ¿cómo es posible que suelo español se convierta en la sala de operaciones de una mafia?», se ha preguntado Álvarez de Toledo en un encuentro con representantes de la comunidad venezolana en Málaga, tras la denuncia de González de haber sido coaccionado ‘por autoridades chavistas’ estando en la Embajada de España en Caracas y que esta pasada noche negó coacciones por parte del Gobierno español.
Así, la dirigente ‘popular’ ha precisado que esa «operación de chantaje y extorsión tuvo lugar en suelo español, en territorio español, en la Embajada española». «A él le dijeron exilio o Helicoide y sabemos lo que es el Helicoide, es un centro de tortura siniestro», ha dicho la dirigente ‘popular’, quien ha asegurado que «el régimen en su delirio tiránico ha confesado el crimen porque ha publicado las pruebas de esa extorsión que tuvo lugar en la sede de la Embajada española».
Ha señalado que la Embajada de los Países Bajos «no lo permitió» y ha cuestionado «por qué dejaron entrar en la Embajada a dos criminales, una de ellos sancionada precisamente por torturas y crímenes de lesa humanidad por la Unión Europea, la señora Delcy Rodríguez, que aparentemente, según informaciones, fue dos veces a la embajada tras llamadas, ¿de quién?, de Rodríguez Zapatero».
También ha preguntado «por qué no denunciaron esa extorsión el señor Albares y el señor Pedro Sánchez si sabían que había tenido lugar»; «¿por qué la han ocultado desde que se produjo? El señor Sánchez se limitó a decir, el señor Edmundo González es un héroe, y lo dijo cuando sabía que estaba siendo extorsionado en la residencia del embajador en Caracas». «Un servicio diplomático no puede estar en ningún momento, ninguna circunstancia, al servicio del crimen», ha manifestado.
Asimismo, respecto a Rodríguez Zapatero ha dicho que quiere saber «qué papel ha jugado en toda esta operación» y ha considerado que el expresidente «ha sido una desgracia para Venezuela y es una vergüenza para España».
De Zapatero, ha dicho que «se ha dedicado a traficar con el sufrimiento de los presos políticos desde hace muchísimos años». «Todos los procesos de diálogo que él ha promovido han sido en beneficio siempre de la dictadura y eso es lo que lleva haciendo desde el día 28, en silencio, callado, pero traficando con el sufrimiento de los presos políticos, los secuestrados y los rehenes al servicio de la dictadura», ha apuntado, lo que «requiere una condena pública, una reprobación moral, política y de todo orden».
Álvarez de Toledo ha considerado que el ministro de Exteriores «está en una posición moral y políticamente insostenible» y ha insistido en que debería, «primero repetir conmigo, con Boric, con Margarita Robles, incluso con Borrell, que Venezuela es una dictadura y a reglón seguido dimitir y dejar su cargo». Además, también se ha preguntado el papel del embajador «como notario de esa extorsión» y ha asegurado que «lo que ha dicho el Gobierno de que no había dos salones en la embajada es mentira».
¡LO QUE ESTÁ EN JUEGO!
«Lo que está en juego en Venezuela desde hace muchos años no tiene nada que ver con siglas de un partido político, no tiene nada que ver ni siquiera con ideologías de izquierdas o derechas, tiene que ver con los valores más elementales, más esenciales que distinguen a los seres humanos. Es la verdad frente a la mentira, es la democracia frente a la dictadura, es la civilización frente a la barbarie», ha asegurado la dirigente ‘popular’.
Ha recordado que «los venezolanos fueron heroica y masivamente a votar, depositaron sus votos en esas urnas y eligieron, según unas actas que están acreditadas y verificadas, incluso por instancias internacionales, a una persona para presidirles». «La verdad no es una versión, una opinión», ha apostillado, al tiempo que ha dicho que «está en juego el sagrado mandato popular».
«¿Por qué el voto de un venezolano vale menos que el voto de un español o de un brasileño?», ha preguntado Álvarez de Toledo, quien ha defendido «las urnas frente a la fuerza, frente a la violencia» y que «una transición legítima solamente puede partir de ese hecho legítimo, de las urnas».
La dirigente ‘popular’ entiende que «no funciona el apaciguamiento frente a la represión y la violencia y la represión y la violencia desde el día 28 han sido brutales», refiriéndose al último informe de Naciones Unidas que recoge acciones «absolutamente espeluznantes, de torturas, violaciones de derechos humanos a niños, a discapacitados, a embarazadas, encarcelados, detenidos; de eso es de lo que estamos hablando, ni siquiera de una dictadura, de un cártel criminal, de una organización criminal que tiene secuestrado a un país».
Según Álvarez de Toledo, «desde hace 25 años muchos operadores internacionales se dedican al apaciguamiento y al diálogo, lo llaman y han dado oxígeno a la dictadura» en Venezuela.
Ha considerado que «hay una izquierda tuerta que solamente ve dictaduras de derechas y hay una izquierda tuerta también que en su locura dice, bueno este tipo es un dictador, sí es verdad, pero es nuestro dictador», lo que considera «intolerable».
Asimismo, ha indicado que «el cinismo no puede ser premiado y ha rechazado a quienes «hacen negocio con la dictadura, que los hay» y ha lamentado este «atropello y violación a los derechos humanos», apuntando que la situación actual afecta a toda Latinoamérica.
Ha querido desmontar «la absurda, infantil y maliciosa coartada del Gobierno cuando dice ‘nosotros no actuamos, no lideramos el reconocimiento de Edmundo porque es importante la posición común europea'» y se ha preguntado «por qué rompen la posición común para reconocer al Estado de Palestina y no para reconocer al presidente de Venezuela».
«Venezuela es una pieza dentro de un tablero mucho más grande, donde hay intereses muy grandes. Los principales aliados de Maduro son China, Putin e Irán, que entienden perfectamente que es una pieza para ir destruyendo el orden liberal desde su interior», ha dicho, por lo que ha incidido en que «es tan importante defender la integridad territorial de Ucrania como defender la democracia y la libertad en Venezuela».
Para la dirigente ‘popular’, «tenemos, los españoles, con Iberoamérica, una responsabilidad histórica y cultural» que «no nos coloca en una posición de condescendencia, sino todo lo contrario, nos obliga». «Y nosotros tenemos que defender para los venezolanos lo mismo que exigimos y reclamamos para nosotros mismos, que es democracia y libertad».
«Vamos a seguir luchando», ha aseverado y ha instado a que «el Tribunal Penal Internacional, y hemos presentado una iniciativa en el Congreso, tiene que dictar órdenes de detención y captura para Maduro y sus criminales y el resto de países del mundo tienen que ir avanzando en el reconocimiento del mandato electoral del 28 de julio». Ha hecho un reconocimiento a María Corina Machado, «una mujer valiente como ninguna otra», con la que habló la pasada noche y que «va a ir hasta el final y nosotros también».
¡Una frase y algo más…!
“¿Que meten a la gente presa sin pruebas? tienen años haciéndolo; ¿qué coaccionan a la familia? tienen años haciéndolo; ¿qué meten presos a familiares? tienen años haciéndolo; ¿qué ponen a firmar cosas? tienen años haciéndolo” (José Ángel Pereira Ruimwyik, ex preso político y expresidente de Citgo).
"La presencia de Delcy Rodríguez y Jorge Rodríguez a su lado mientras firmaba ¿qué estaban haciendo? ¿Felicitándolo por lo que estaba haciendo? No, estaban chantajeándolo e intimidándolo en territorio español" (Héctor Schamis, analista político).
“Uno conoce la naturaleza del chavismo: extorsionadora y secuestradora. Pero lo que nos indigna es ver a un Gobierno como el español, prestando su suelo para que los sancionados hermanos Rodríguez amenacen al presidente electo de Venezuela” (Hablando en España con @okdiario).
“Bajo ninguna excusa se puede tolerar que en una Embajada española se coaccione a nadie … mucho menos por quienes protagonizan un demoledor informe sobre violación de Derechos Humanos” (Alberto Núñez Feijó, Pte. del Partido Popular español y miembro del Congreso de los Diputados).
“Podría haberme escondido, pero tenía que ser libre para poder hacer lo que estoy haciendo, transmitir al mundo lo que está pasando en Venezuela, hacer contactos con líderes mundiales” (Edmundo González Urrutia).
“La defensa de la verdad no es violencia. Violencia es ultrajar la verdad” (María Corina Machado).
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