Mis Memorias Inconexas

Jamás renuncies a tus sueños (II) Un sueño para Venezuela Desde mi tribuna, que es el aula de clase trato siempre de hacer soñar a mis estudiantes, soñar despiertos le digo para no tener pesadillas, ver la realidad es lo más importante. En los materiales que utilizo para la motivación hay un poema de Amanda Pierce titulado “Jamás renuncies a tus sueños” , es cierto, mucho hay de verdad cuando nos encontramos desencantados, que las cosas no marchan bien, el no puedo, el aquí la clave, aquí nos quedamos, por eso Amanda nos dice, no te desalientes, no te rindas, no renuncies jamás. Estas cosas sino las internalizamos, pasan como un ejercicio más de un taller que se dicto el día tal, por eso la tarea de un “sueño para Venezuela” . En este blog verán lo que escribieron los hombres, lo que expresan, cuáles son sus sentimientos para la patria grande. Julio uno de los participantes en el curso-taller “Formación de Promotores Cooperativistas” nos dice “…huérfano de padre desde los

Jamás renuncies a tus sueños (I) Un sueño para Venezuela Dayana, uno de los nombres de mi querida ex alumna y ahora amiga, cuando le pedí que escribiera algo sobre ella y un sueño para Venezuela, expresaba lo siguiente “…yo me considero una persona que se adapta con facilidad a los cambios, lo cual me ha permitido realizar diversas actividades en mi vida, luego que me gradué de Bachiller en Ciencias, a los 17 años, hice cursos de computación e inglés y mientras tanto trabajaba como recepcionista en diversas compañías, fui Boy Scout (guía mayor), y en toda la trayectoria de mi vida me di cuenta que la vida de ciudad (soy caraqueña) no era lo que deseaba, no soporto estar en sitios encerrados por mucho tiempo (a menos que sea mi cuarto). En la mayoría de las actividades que me gustan trato de ofrecer lo mejor, baile, deporte, artes marciales, natación, entre otros, no me gusta que me impongan tareas a lo macho, no me adapto y mientras tenga cosas que aprender voy a hacer lo pos

Antes de que el agricultor recoja la cosecha, tiene que preparar el terreno, sembrar la semilla y cultivar el campo: igual cosa ocurre con el maestro quien tiene que cultivar la mente, desarrollar buenos sentimientos e inspirar nobles ideales en el niño. Si se pierde la cosecha del agricultor, su familia sufre hambre. Si fracasan los niños de una nación, ésta sufrirá las más funestas consecuencias. El maestro tiene la responsabilidad de velar que el niño se desarrolle en toda su capacidad. La “Maestra Olimpia” como cariñosamente se le conocía, tenía un parentesco muy grande con mi persona, no solamente era mi tía paterna, sino que era mi tercera mamá, “maimpa” como fraternalmente yo le decía. Comienza a viajar mi memoria de niño/adolescente, allá hacia finales de los años 40, mi tía Olimpia era Maestra en Punto Fijo, luego recuerdo que en los años 50, ya trabajaba como Maestra en la Escuela Nacional Graduada “Lucrecia de Guardia” en la ciudad de Coro, como Maestra de 5º grado ti

Descansa en paz Anciano pescador   La historia que hay detrás de mi relato, son cosas vividas, tienen lugar en un pueblito campesino de pescadores llamado “Codore de la Playa” , ubicado en el Municipio Urumaco, para llegar a él, uno atraviesa el pueblo de “Río Seco” , pasa una quebrada seca, bastante ancha porque para atravesarla hay que rodar, enseguida otro pueblito llamado “Ocorote” , son los más cercanos que podemos encontrar por allí. Al norte del sur, que identifica este pedacito de tierra en esta gran globo terráqueo, un país rico pero pobre, que paradoja compadre, aquí en estos pueblitos hay mucha gente pobre, donde se pasa hambre y desolación, se las cuento porque la he vivido. En febrero de 2003, comenzamos un trabajo con la comunidad de “Codore de la Playa” , era una actividad práctica del curso-taller “Formación de Promotores” , y lo primero que nos llamó la atención, un matrimonio de ancianos abandonados en un rancho. Él ciego pero cuerdo, sabía dónde esta