Programa de Producción Animal. Colaboración con otros organismos. Proyecto MAC-FAO Venezuela 17.

Con el transcurrir del año 1973 otras actividades ocuparon nuestro tiempo, la colaboración con varios organismos, mencionaremos en primer lugar el Ministerio de Obras Públicas (MOP), División de Obras Hidráulicas en asesoramiento e investigación operacional del “Módulo Experimental de Mantecal” para control de aguas y recuperación de tierras. Aquí conocí a Santiago Farinas Jorge, Médico Veterinario y al Zootecnistas Martín Rodríguez, con los cuales tuve oportunidad de compartir en el trabajo realizado en los módulos. Con Santiago nos hemos encontrado varias veces, ingreso a la UNELLEZ al Programa Producción Animal del Vice-Rectorado en Producción Animal; a Martín nunca más lo volví a ver. En segundo lugar mencionaremos la solicitud de asistencia a los Asentamientos Campesinos “Payarita” y “Araguaney” del Estado Apure. Estos asentamientos venían de participar de un “Programa Ganadero en Asentamientos Campesinos del Estado Apure” donde habían participado diferentes organizaciones gubernamentales. Ahora bien, estaba pasando algo que no permitía que esto avanzara; pero antes de comentar el problema, analicemos las condiciones por ejemplo del asentamiento campesino “Payarita”. Este asentamiento contaba con 400 Has. Con pasto guinea y alemán, tenía una superficie en reserva considerable de pastos naturales de buena calidad. Tenía un moderno sistema de corrales con todos sus anexos (manga, brete, bañadero, romana y embarcadero), una laguna y dos pozos profundos. El programa era de gran trascendencia no sólo porque podía influir en el desarrollo económico de Apure y contribuir a modificar su condición de estado esencialmente criador que enviaba su ganado a engordar a otras regiones, pese a tener tierras de buena calidad. Que paso con nuestro apoyo, el día que acordamos inicial los trabajos, había que hacer labores de identificación del rebaño mediante los métodos de fuego y el pesaje de los animales. Los campesinos de la unión de prestatarios, lo que querían era que nosotros hiciéramos todo el trabajo; hablamos, la respuesta que el gobierno nos había enviado para que hiciéramos el trabajo. Ellos pretendían que mientras nosotros trabajábamos ellos tomando aguardiente (Ron); por supuesto ordene a mi equipo que nos retiráramos. Después de cierto tiempo pregunte, que había pasado con las asentamientos campesinos, la información que tuve habían vendido el ganado y abandonado el sitio. Cabe aquí hacer una pequeña reflexión, esa primera experiencia me llevo a concluir, “el veguero no le gusta trabajar”. El Dr. John Bateman era asesor de la FAO al Proyecto, una vez le comente, que porque no traíamos granjeros americanos para que le dieran fortaleza al campesino; y me contesto, no, porque se ponen tan vagos como los vegueros. Será una cuestión de idiosincrasia o es que los gobiernos con su populismo desmedido han dañado a esas personas. Según me comentaron colegas que pude entrevistar, el Programa era cuidadosamente supervisado tanto en relación a los costos y evaluación del rendimiento, como acerca de la actitud adoptada por los campesinos beneficiarios. La pregunta obligada es, ¿Qué pasó?

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